lunes, septiembre 10, 2007

Montaje de la 247 MkI, Fase II

Entiendo que la foto es como para castigar al fotógrafo poniéndole detrás un político en campaña dándole morcilla con sus ofertas electorales, pero es lo que hay. Salí para la estepa después de tener clase en Madrid hasta las 3 de la tarde del sábado, y me olvidé la cámara, con lo que hubo que recurrir al teléfono móvil. El resultado no es completamente patético, sino sólo un poco lamentable.

Y es lástima, porque la moto empieza a apuntar maneras. Dejamos listas las ruedas y suspensiones, así como ambos frenos. El resultado es que la moto ya rueda. Que no es poco. Tengo dudas sobre el funcionamiento de la horquilla porque me da la sensación de que el SAE 10 que le he puesto queda algo ligero para esta moto, pero mientras no pongamos el motor es complicado estimarlo.

Aunque se vea mal, monté el manillar original con soportes de maneta que me mandó John, así como las manetas Amal originales ya cromadas. Y puede que sea un detalle menor, pero el brillo del niquelado original del manillar es sensiblemente diferente al del cromo moderno. ¿Tal vez más azulado? De momento está sin puños ni mando de gas, pero creo que le pondré unos Renthal suaves sobre su mando Amal cromado de toda la vida. Es una combinación extraña, pero los originales no permiten usar cierre de seguridad con alambre, y siendo una moto a usar en carreras, es un disparate jugarse una caída como aquella de Cabanillas en mi primera carrera con la 349.

Donde sí tengo un problema es en uno de los amortiguadores traseros, que tiene el vástago doblado y se queda pillado. Habrá que ver si encuentro quien lo repare con rapidez o si uso temporalmente otros amortiguadores.

En la foto de arriba puede verse al culpable, junto con la rueda trasera ya montada. La verdad es que pese a la poca calidad de la foto, el efecto de las piezas pulidas y cromadas es más que notable. El tirante de reacción opté por cincarlo, pese a que tengo la duda de si va así o pintado en el mismo blanco del chasis. Pensé que si me equivocaba era más fácil pintar algo cincado que cincar algo pintado. Y el de mi moto no tenía trazos de pintura.

Lo que sí encuentro son pequeños detalles que diferencian piezas aparentemente iguales. Por ejemplo, en la rueda delantera, cuya foto pongo abajo:

... utilicé un cubo de rueda de 34M (King Scorpion) segunda serie aparentemente igual al de la Cota (21M), pero al montar me encontré con que el reenvío de cuentakilómetros es diferente, y que tendré que optar entre taladrar el buje para hacerle la ranura que lleva el de 247, o usar un reenvío de King. De momento lo he dejado sin hacer.

Con un poco de suerte, intentaré dejar lijado e imprimado el depósito, recogeré el resto de piezas de cincado para poder montar estriberas y algunos tornillos clave, y esperaré que Ramón me consiga los guardabarros en Expósito ... y Jesús tenga tiempo para montar los rodamientos del cigüeñal.

Pocas veces he estado con tantas ganas de terminar de poner una moto en orden.

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Como diría Juan Ramón Jiménez, mi troll es pequeño, peludo, suave; tan blando por fuera, que se diría todo de algodón, que no lleva huesos.

Probablemente no tiene huesos y por eso insulta bajo seudónimo. Pero además de cobarde es tan coñazo que he decidido que sólo me moleste a mi. De tal modo que a partir de ahora me quedo con la exclusiva de leer sus bobadas. Disculpadme el resto que os haga pasar por la "moderación" de vuestros comentarios.