sábado, mayo 27, 2006

Un paréntesis

Después de retomar el hilo de la King Scorpion hace diez días, se me ha vuelto a ir la cabeza un poco. Pero creo que la cosa ha merecido la pena. Al menos no he estado tan "en dique seco" como en ocasiones anteriores.

El fin de semana pasado fuimos a Barcelona a por la King Scorpion americana de mi amigo Carlos, que ya llegó y espera en Madrid a que la traslademos de nuevo y empiece el proceso de catalogar, inventariar, etc. La verdad es que la moto ha salido en un precio muy interesante y está bastante completa. La duda es ahora si la restauramos o simplemente le damos un lavado de cara. Si salen las cosas como esperamos, el próximo fin de semana la llevaremos a su destino temporal y le haré unas fotos. Es tambien una primera serie temprana (34M03xx), con lo que no diferirá mucho de la mía, y nos vendrá de cine para comparar algunas cosas.

La otra cosa que trajimos de Barcelona fue esa preciosa Cota 25 que podéis ver en la foto de arriba y que me he comprado 36 años después de empezar a desearla como un loco. No seré yo quien la conduzca, pero espero que mi hija Cecilia la disfrute. De momento está encantada con eso de que su moto sea "como la Montesa de papá". Tanto, que no me he resitido a hacer una foto de ambas Montesas al sol manchego de la primavera. ¿Verdad que son bonitas?.

Pues conste que el mérito no es mío en este caso. Al menos en la pequeña, que la ha hecho mi amigo Ramón Valls, con el rigor y la precisión que él suele poner en todo lo que hace. Sólo hay un detalle que no corresponde a la moto, que es el puño de gas. El cromador disolvió en ácido el original, y uno reproducido sale en 120 euros, lo cual me parece un absoluto disparate. Ya veremos si resisto las ganas de comprarlo.

La Cota 247 que acompaña a la 25 es una Mk IV con la que hice mis primeras armas en esto de la restauración. Una moto preciosa para mi gusto, y que tendré que rehacer algún día ahora que sé mejor como se hacen las cosas. De momento, hace quince días la puse a punto con un micrómetro que me vendió Eduard Carol, y que ha resultado ser un buen invento.

La otra moto que me trae de cabeza últimamente es una Ossa TR 80 que compré hará un año poco más o menos, y que está costando más trabajo del inicialmente previsto. Entre otros achaques, resultó tener fastidiado un retén del cigüeñal, y el sistema de extracción ha sido bastante estupefaciente. Si los extractores de las Montesa son a veces como para camión, lo del cigüeñal de Ossa es como para darle de comer aparte. Igual algún día lo cuento con más detalle, pero de momento, ahí queda una foto de la Ossa tal como andaba hace unos meses. Más adelante colgaré una de como está quedando.

2 comentarios:

  1. Anónimo12:56 p. m.

    Julián: Me gusta mucho la cota pequeña, y creo que efectivamente Cecilia la disfrutará mucho, aunque creo que mas va disfrutar el padre viendo montar a su hija¡
    Respecto a "Si salen las cosas como esperamos, el próximo fin de semana la llevaremos a su destino temporal .." pues eso, estoy segura que contareis con el permiso de la "autoridad" competente en estos casos... :-)al menos de una de las partes interesadas....

    Maria

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  2. Anónimo4:15 p. m.

    No puedo dejar de reseñar, justo en este post, que gracias a esta maravilla de foto contacté con Julián.

    La suerte está echada......

    pepe jimeno

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Como diría Juan Ramón Jiménez, mi troll es pequeño, peludo, suave; tan blando por fuera, que se diría todo de algodón, que no lleva huesos.

Probablemente no tiene huesos y por eso insulta bajo seudónimo. Pero además de cobarde es tan coñazo que he decidido que sólo me moleste a mi. De tal modo que a partir de ahora me quedo con la exclusiva de leer sus bobadas. Disculpadme el resto que os haga pasar por la "moderación" de vuestros comentarios.